mayo 30, 2013

Dímelo

Es raro poner tu nombre
o ponerlo de etiqueta.
Por eso espero un tiempo antes de hacerlo.
Pero, ¿importa?
¿Te importa si escribo de ti y pongo tu nombre?
Dímelo
En serio quiero saberlo.

Es raro que leas mis sentimientos
y no comentes tu opinión
Yo te dije que no lo hicieras
Pero, ¿importa?
¿Te importa lo que dije antes?
Dímelo
En serio quiero saberlo.

Es raro que al mirarte solo quiera besarte
no sé si sientes como miro tus labios.
Y es que es imposible no hacerlo.
Pero, ¿importa?
¿Te importaría si te beso otra vez?
Dímelo
En serio quiero saberlo.

Es raro que evite tu conexión con ella
cuando me alejo para no sentir odio
Y es que los malos pensamientos vienen.
Pero, ¿importa?
¿Te importa que me aleje cuando estas con ella?
Dímelo
En serio quiero saberlo.

Es raro verme al espejo después de hablarte
porque todo lo que veo es el desastre que ves tú.
Ese desastre que tengo marcada en la vida.
Pero, ¿importa?
¿Te importa que me vea como un desastre?
Dímelo
En serio quiero saberlo.

Es raro que leas esto y no hablemos al respecto.
Tú lo lees y solo callas.
A veces quisiera hablar del tema.
Pero, ¿importa?
Sí, claro que sí. Porque estos son mis pensamientos más profundos.
Y te los confieso a ti a través de esto.
¿Te importaría mencionarlos cuando tengamos una conversación real?
¿Te importaría que sea cuando nos veamos?
¿Te importaría si tengo la mirada baja?
¿Te importaría si fuera un viernes?
Dímelo
Porque estaré ahí esperando frente a tí.
Y lo único que podré expresar es
cuanto quiero saberlo.



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